Nuestro Instituto tiene una larga tradición —toda su existencia— de practicar exitosamente la vinculación con organismos gubernamentales y privados. Lo ha hecho mediante la realización de estudios e investigaciones aplicadas para la solución de una gran diversidad de problemas que requieren ingeniería de alto nivel. Así, ha contribuido en las principales obras hidráulicas del país, en la elaboración de reglamentos de construcción, normas y manuales técnicos, en importantes obras de infraestructura, por nombrar algunas áreas en que se ha realizado vinculación por la vía de los estudios.
Sin embargo, el Instituto de Ingeniería no se caracteriza por ser particularmente productivo en tecnología, entendiendo ésta como el logro de patentes, desarrollos tecnológicos y su transferencia a usuarios. Esta forma de vinculación, un paso subsecuente en relación con la investigación, es escasa en la UNAM y en México, resultado en buena medida de la falta crónica de elementos indispensables para conformar un sistema de innovación eficiente.
El Instituto de Ingeniería, con base en su experiencia y trabajo en investigación aplicada, podría ser líder en México en la generación de patentes y en su transferencia al sector productivo. Las investigaciones que se desarrollan en el Instituto, inclusive en algunas ya terminadas y archivadas, podemos encontrar elementos susceptibles de protección industrial que nos llevarían en corto plazo al registro de varias solicitudes de patente. Sin embargo, esto no sucederá si no actuamos para difundir entre el personal académico una cultura de la innovación tecnológica y la propiedad industrial.
Para avanzar en ese sentido, y de acuerdo con lo expresado en el plan de desarrollo del Instituto, se creó en 2009 la Unidad de Patentes y Transferencia de Tecnología del Instituto de Ingeniería. El objetivo de esta Unidad, adscrita a la Secretaría Académica, es contribuir a proteger la propiedad industrial de las investigaciones realizadas en nuestro instituto con elementos tecnológicos innovadores, con el fin de lograr su transferencia al sector productivo. Dicha Unidad —integrada por el maestro Rodrigo Cárdenas y Espinosa y el ingeniero Gustavo Cadena Sánchez, encargados de la propiedad industrial y de la transferencia de tecnología, respectivamente— brindará apoyos al personal académico que los solicite. Por un lado, apoyan la protección de la propiedad industrial mediante la evaluación de las posibilidades de patentar las invenciones desarrolladas y la redacción correspondiente para la solicitud de patente; por otro, ayudarán en lo necesario para lograr la transferencia de tecnología de productos, procesos o servicios (PPS) al sector productivo, mediante la asesoría y apoyo directo en la elaboración de los documentos para conjuntar el paquete tecnológico, así como en la negociación del licenciamiento de la tecnología, de acuerdo con la Legislación Universitaria.
La incursión del Instituto en forma más decidida en esta área podrá acrecentar el impacto de nuestro trabajo académico, ya no sólo en la formación de personal de alto nivel y en la publicación de resultados, sino en aportaciones al acervo tecnológico nacional. Con ello, incrementaríamos el retorno que nuestro Instituto hace a la sociedad mexicana por lo que en él se invierte.